Y aunque en la foto tienes incrustada un resumen de sus propiedades, seguro que si navegas por internet te encuentras muchas más cosas interesantes.
Las puedes combinar con más verduras o consumirla en batidos.
Se pueden comer salteadas, en ensaladas, incluirlas en revueltos, incorporarlas en guisos de legumbres como garbanzos o fabas.
También se pueden utilizar para rellenar pechugas de pollo o filetes de pescado.
Granizado de espinacas, una sana y refrescante bebida para el verano
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