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domingo, 3 de septiembre de 2023

SECCIÓN DE FARMACIA CAMBIA DE UBICACIÓN

Ayer me dediqué a redistribuir el espacio de mi mirador. 
También por salud nos ha tocado poner hace unos días el aire acondicionado. 
Tristeza me ha dado quitar una jardinera alargada llena de preciosas ALOE VERA para dejar sitio al bidón del agua de condensación.
Hace ya la friolera de dos décadas y media cuando una profesora, observando a mi hija todo el curso, nos regaló (a mí para ella) una planta bien pequeñita de un ALOE VERA. 
Me regaló también unas fotocopias a modo de librito con las propiedades y usos. Y unas instrucciones verbales que no se me han olvidado jamás:
Hasta los tres años no alcanzará la madurez. 
Muchos años más tarde no llegué a ver la primera flor.
Lo que sí hice a las pocas semanas se tenerla, viendo de nuevo el brote de dermatitis de la niña, desesperada yo y desesperada mi hija, le corté el primer trocito y .... ¡Magia!
Durante las dos décadas siguientes me dediqué a regalar salud. El Aloe Vera se reproducía muy bien y constantemente reubicaba las plantas a medida que crecían y usábamos como crema mágica:
Dermatitis, quemaduras, herpes, callos...  ya ni me acuerdo, servía para todo, en estado puro.
Y al mismo tiempo me reinventaba en la cocina con pequeños cambios en la rutina culinaria.
Hoy. Ésta es la única que he respetado. La planta está llena de hijos del Aloe Vera y la madre lleva muchos años que salió por los barrotes buscando un poquito de Sol.
Otras dos las he vuelto a plantar en esa jardinera alargada y bajita que ni casi caben las raíces. Las he atado con trenza de ESPARTO a los barrotes para que sigan erguidas. 

INSTRUCCIONES DE TRASPLANTE: He dado orden a mi chico que hasta dentro de una semana como poco no se podrán regar. ¿Por qué? A la planta la he herido en sus raíces al sacarlas de su tiesto y reubicarlas en otro. Es necesario cicatrizar y lo último que quieren es agua que humedezca las heridas y sean propensas a coger ninguna enfermedad por hongos o bacterias. 
También mi madre me ha  comentado y recordado que, si voy a regalar salud a otra familia, les diga que las he tenido con toda la luz y humedad pero en la sombra. Necesitan Sol, pero en su justa medida. Y aunque si las regamos regularmente lo agradecen, no olvidemos que son CACTUS y se mantienen solo con la humedad del ambiente. 
Pueden pasarse meses sin replantar, hasta que se decida su nuevo hábitat. Lo habitual cuando retiramos hijos a la planta madre es dejarlos a sus pies, al abrigo de su madre y hasta que sequen sus heridas y mientras tanto tenemos tiempo para decidir su destino.

Y aunque es MAGIA lo que hace el ALOE VERA en nuestras células ya casi ni la uso porque tengo alternativa con otras CREMAS MÁGICAS

Si quieres seguir curioseando...







KEFIR (DE LECHE)

Cristal o plástico como contenedor. Plástico el cubierto y colador. Y ya tienes con qué entretenerte todos los días mientras cui...